anto

jueves, 30 de septiembre de 2010

Castigo

Castigado en un rincón me someto al dolor de no escuchar tu voz
Sabes que me hieres si no te tengo y prosigues
Vivida la hermosura de un adiós interesante
Piensas mientras canto en soledad la llegada de tus peros
Sin embargo el sueño me cohíbe ya que fallo en cada intento cuando cierro los ojos
Pero luego me enamoro de tus codos de tus manos
Tan llenas de cordura rebalsadas de locura

Estrellas desafiadas por mi paciencia por mi ausencia
Renuncio a la soledad que me acerca y me molesta
Acéptame atardecer amarillo y redundante
Protegedme mi amor fuerte y danzante
Ungeme señor libérame y tómame
Así como hoy por la mañana
Así como ayer y durante la semana


Amo tu bondad y tu destino
Amo que me perdones mi gran amor divino
Amo que me ignores pues me acerco y me interno
Amo que no rime nuestro espacio nuestro nido
Amo esta espera abollada por un rió de arena
Amo que me esperes molesto y fruncido
Amo saber que me esperas escondido de nuestro libido.